martes, 7 de mayo de 2024

Qué es la neurodiversidad y cómo las redes sociales ayudan a las personas a ser diagnosticadas

Mucha gente nunca había oído hablar de la palabra neurodiversidad hasta hace unos años. Sin embargo, el término, utilizado para describir las amplias y variadas diferencias que se encuentran en el cerebro humano, ahora entró en nuestro vocabulario general.

Redes sociales como Clubhouse, Twitter y TikTok han jugado un papel crucial en ese cambio. Han proporcionado un espacio muy necesario donde las personas pueden hablar sobre sus diferencias neurológicas, Todo esto, a pesar de los tantos transtornos que, según sus detractores, indudablemente provocan.

De hecho, a muchos, las redes sociales les han dado la prueba que necesitaban para darse cuenta de que son "neurodivergentes".


(Ilustración: Getty Images).

Fue particularmente valioso durante el aislamiento debido a la pandemia, cuando las personas con cerebros diversos pudieron encontrar comunidades y personas en internet con las que podían relacionarse.

Entonces, ¿qué es la neurodiversidad?

Es el reconocimiento de que la mente puede funcionar de varias maneras y que estas diferencias son solo variaciones naturales en el cerebro humano.

Lawrence Fang, director de proyectos de neurodiversidad de la Universidad de Stanford (Estados Unidos), lo define de la siguiente manera: "Es solo una forma de describir que nuestros cerebros son diferentes y, como cualquier ser humano, nadie es bueno en todo lo que hace o emprende".

Fang cree que puede ser más difícil para algunas personas reconocer o aceptar las diferencias que ocurren en el cerebro: "La diversidad de género es algo que podemos identificar fácilmente, así como la diversidad étnica racial es algo fácilmente detectable porque podemos verlo. Pero la neurodiversidad es algo que no se puede ver la mayor parte del tiempo", agrega.

Las personas que son neurodivergentes pueden tener variaciones cognitivas como autismo, trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH), dislexia o dispraxia.

Hay tres tipos principales de TDAH y sus efectos pueden variar de una persona a otra. A menudo se diagnostica en la infancia, pero cada vez más adultos descubren que experimentan este tipo de neurodivergencia.

El movimiento de la neurodiversidad

Según el programa "Neurodiversidad en el Trabajo" de la Universidad de Stanford, entre 15% y ​​20% de la población mundial se considera neurodiversa. Durante la década de 1990 hubo un movimiento que creó conciencia sobre la neurodiversidad y abrazó la inclusión de todas las personas con una posible neurodivergencia.

Judy Singer, socióloga australiana, acuñó el término neurodiversidad en su tesis de 1998 para promover la igualdad y la inclusión de las "minorías neurológicas". Hoy en día, la neurodiversidad se considera un movimiento de justicia social y ha adquirido una conciencia mucho más generalizada. La investigación y la educación son cada vez más importantes en la forma en que se ven ciertas discapacidades y afecciones neurológicas.

Dificultades con el diagnóstico

El ya mencionado Fang explica que el proceso de obtener un diagnóstico formal varía ampliamente en todo el mundo y puede ser muy costoso, razón por la cual muchas personas no siguen esta ruta, aunque advierte que buscar ayuda profesional tiene importantes beneficios.

"Creo que la preocupación potencial podría ser que, a veces, hay sitios web que diagnostican a las personas en función de lo que dicen los parámetros pero, de hecho, no es tan sencillo como un diagnóstico de un sitio web", señala y agrega: "Por ejemplo, las personas en el espectro del autismo a veces tienen comportamientos estereotípicos como conductas repetitivas y esto podría confundirse con los comportamientos obsesivos en el trastorno obsesivo compulsivo".

Si tenemos un diagnóstico incorrecto, entonces básicamente entramos en el camino equivocado y es por eso que es más útil tener un diagnóstico con un experto en neurología.

Más difícil para las mujeres

Aunque las redes sociales están facilitando que las personas obtengan apoyo, las mujeres aún tienen menos probabilidades de ser diagnosticadas porque, increíblemente, muchos médicos y profesionales de la salud mental a menudo pasan por alto sus síntomas.

A la hora de realizar una prueba de autismo, Fang dice: "Los hombres tienden a tener un comportamiento más estereotípico, más repetitivo, y se ve menos en las mujeres. Eso es algo que hace que estas patologías sean mucho más fáciles de identificar en pacientes hombres".

La investigación de Fang encontró muchos más "camuflajes" en las mujeres en el espectro, en comparación con los hombres. Camuflar o enmascarar es el uso de estrategias para disimular las características autistas y compensar las dificultades sociales asociadas con ello. Estas estrategias pueden ser utilizadas conscientemente o no.

Cuando se trata de TDAH, Fang dice que hay más mujeres que son del tipo atento y más hombres que muestran más del tipo hiperactivo de impulsividad imponente.

En entornos escolares, por ejemplo, el especialista señala: "Si un alumno hace bien su trabajo de clase  y está callado, a los maestros no les importa, generalmente piensan que ese alumno está bien. Los alumnos hiperactivos e impulsivos son los lborotadores y es por eso que llaman la atención".

Panorama positivo

Algo que promueve el movimiento de la neurodiversidad es el autocuidado. Debido a que la conciencia sobre la salud mental ha aumentado en los últimos años, hay más discusiones sobre el cuidado de la salud que también llega a las personas neurodivergentes, y esto podría ser un factor de por qué las redes sociales fueron prolíficas como herramienta de diagnóstico.

Ha habido un gran desarrollo en la forma en que nos sentimos acerca de estas condiciones. "Creo que una cosa que es definitivamente diferente de hace 20 años, cuando no se usaban las redes sociales, es que ha disminuido el estigma de las enfermedades mentales y las enfermedades neurodivergentes", sostiene Fang acerca de la vergüenza de confesar la patología y la condena y la burla que muchas veces sufren quienes se animan a confesarla.

Casi todas las personas afectadas coincidien en cómo la conciencia y la comprensión de sus realidades han ayudado a mejorar su calidad de vida. Algunas figuras prominentes -músicos, actores, deportistas, grandes empresarios, etc.- también se han pronunciado sobre sus propios diagnósticos, y estos "relatos de alto perfil" sobre la neurodiversidad pueden hacer que más personas piensen en sus experiencias y, a su vez, ayudan a que más personas se hagan la pregunta: ¿soy neurodivergente?.