miércoles, 26 de junio de 2024

El ingenio nacional a través de la historia: un recorrido por los inventos argentinos

Argentina es cuna de grandes inventos que hoy forman parte de nuestra vida cotidiana. De hecho, hay muchos que ni sospechamos que son de origen nacional.


El fotoliptófono fue patentado en 1931 por el ingeniero argentino Fernando Crudo (Foto: Wikimedia).

Mentes inquietas, curiosas e ingeniosas le dieron vida a inventos con los cuales convivimos actualmente. Vamos a descubrir a los y las protagonistas de las creaciones y sus ideas, algunas curiosas, otras sabrosas y algunas que fueron útiles hasta para salvar vidas.

Fotoliptófono

El ingeniero argentino Fernando Crudo creó un dispositivo óptico de registro sonoro en un soporte de papel. Lo pensó como una manera económica de distribución masiva de música y sonidos.

Fue patentado en Argentina en 1931. Su inventor tenía la intención de publicar música y discursos en los diarios. Aunque fue reconocido internacionalmente, tras el cambio tecnológico de la posguerra el fotoliptófono quedó en el olvido.

Camilla automática

La camilla automática para emergencias médicas es uno de los inventos argentinos más recientes. Fue creada en 1994 por el argentino Claudio Blotta. Se utiliza para levantar, de manera no traumática, a un paciente o herido.


Se trata de una camilla cubierta por una sábana que funciona como una cinta transportadora formada por delgados cilindros de goma. Esto permite transportar al paciente hasta otro lugar, evitando cualquier movimiento. En 1997, esta creación obtuvo la medalla de oro en la Exposición Internacional de Inventos de Ginebra, Suiza.

Tapa a rosca degollable


Si hablamos de objetos de uso diario, nada más cotidiano que abrir y cerrar una botella con tapa a rosca. En 1968, Jorge Weber desarrolló y patentó este invento que se pone en funcionamiento todos los días, en todo el mundo.


Una botella llega cerrada herméticamente al usuario y, al girar su tapa, esta se corta y se abre sin ninguna complicación. Luego, puede cerrarse y el producto se mantiene en perfecto estado.

Holofonía


En 1980, el argentino Hugo Zuccarelli desarrolló y patentó el sonido holofónico. Es una técnica de espacialización sonora que consiste en un sistema acústico que permite crear la ilusión de tridimensionalidad.


La holofonía es el único sistema con percepción 3D que también puede escucharse en mono, dado que las relaciones de fase son nulas (invirtiendo la polaridad de un canal, el efecto no se altera). Por esa razón, al oírse mediante auriculares, el efecto es percibido sin que haga falta estar en el centro de la habitación.

Jeringa y aguja autodescartable

En 1992, Carlos Arcusín creó la jeringa autodescartable, indiscutiblemente uno de los grandes aportes para la salud humana, invención clave para evitar contagios de enfermedades como la hepatitis y el HIV.


La jeringa autodescartable (a diferencia de la descartable) viene con dos posiciones: una de succión y otra de inyección. Como el cuerpo, el émbolo y el pistón forman una sola pieza que no se desarma, sólo puede usarse por primera y única vez.

Transfusiones sanguíneas

Aunque a principios del siglo XX ya existía la transfusión de sangre, podía concretarse únicamente si se hacía en el momento de su extracción. En 1914, el médico argentino Luis Agote marcó un hito en la historia de la medicina mundial.


Creó un sistema para mantener la sangre sin coágulos, permitiendo su uso diferido. Descubrió que, utilizando citrato de sodio, conseguía mantener la sangre en estado líquido. Este invento argentino lograría salvar millones de vidas.

Semáforo para ciegos

En 1983, Mario Dávila inventó el semáforo para ciegos, un panel electrónico frontal que se adhería al poste del semáforo. Con el tiempo, el dispositivo se fue perfeccionando.


¿Cómo funcionaba? Cuando el semáforo de vehículos estaba en verde, el semáforo peatonal emitía una señal sonora entrecortada. Al cambiar a rojo, el sonido era más fuerte y la señal era continua. Este sistema permitió a las personas ciegas saber si podían cruzar la calle o si debían esperar.

Milanesa napolitana

Esta clásica comida argentina es obra de un argentino. Fue creada en los años '50 por Jorge La Grotta, dueño del restaurante porteño El Nápoli. De ahí recibe el nombre "napolitana". Como ocurre con algunos inventos, su nacimiento fue por un error.


Resulta que un cliente del restaurante siempre pedía la misma milanesa. Pero un día, la fritura se pasó y era la única milanesa disponible en el restaurante. Entonces, el dueño la quiso "arreglar" cubriéndola -más bien escondiéndola- con queso, jamón y tomate... ¡y qué bien que salió!

Sistema dactiloscópico

En 1891, el policía argentino Juan Vucetich ideó un sistema de identificación de personas por medio de sus huellas digitales. Este método de clasificación y tecnología es lo que se conoce como sistema dactiloscópico argentino.


Al año siguiente, ocurrió un doble homicidio de dos chicos de Necochea, el famoso caso de Francisca Rojas. Fue el primero en el que se descubrió la identidad del autor de un delito gracias a las huellas dactilares.

Transporte colectivo de pasajeros

El concepto de colectivo como medio de transporte urbano nació en Buenos Aires en el año 1928. Resulta que, ante la baja de pasajeros, un grupo de taxistas decidió realizar un recorrido fijo permitiendo subir a varias personas y cobrando menos de lo que costaba un taxi. Lo anunciaron así: "taxi colectivo".


Por esa época, el transporte público era dominado por el tren, el tranvía y el subte, cuyos pasajes eran mucho más económicos que los de los taxis, por lo que los choferes de estos vehículos padecían una baja considerable de pasajeros. Movidos por esa preocupación y con el objetivo de aumentar sus ganacias, idearon la posibilidad de subir a más de un pasajero y cobrarle una tarifa personal de acuerdo al recorrido.

Luego de algunas pruebas donde trasladaron a pasajeros que asistían a espectáculos deportivos, el primer viaje se hizo en la mañana del 24 de septiembre de 1928. A pesar de las versiones encontradas que difieren acerca del lugar de origen de ese primer viaje, lo cierto es que el trayecto se dividió en dos tramos, que costaban 10 centavos cada uno: Lacarra hasta Plaza Flores y desde allí finalizaba en Caballito, en plaza Primera Junta y luego a la inversa.

Dibujos animados


El mundo de los dibujos animados suele relacionarse con Disney y Estados Unidos; sin embargo, fue en 1917, en Argentina, que se creó la primera película animada de la historia: "El apóstol".


Quirino Cristiani (Foto: Wikimedia).

El guión visual, diseño, dibujos y dirección fueron obra de Quirino Cristiani. Era una sátira sobre la vida de Hipólito Yirigoyen. En ella se usaron cerca de 58.000 dibujos hechos a mano y rodados en fotogramas de 35 mm. En 1930, Cristiani creó "Peludópolis", el primer largometraje de animación sonoro.

Helicóptero con palas rotativas


Otro de los inventos argentinos que significó un gran aporte al mundo es el helicóptero con palas contrarrotativas. En 1920, Raúl Pateras de Pescara, patentó en España este diseño que permitió concretar el primer despegue y aterrizaje.


A partir de aquel momento, los ingenieros de todas partes del mundo copiaron el modelo de este artefacto. Incluso, su sistema sigue siendo guía para la fabricación de los helicópteros más modernos.

(Fuente El Destape Web / varias)