viernes, 2 de agosto de 2024

Un experimento revela que los perros pueden jugar a videojuegos y reconocer los nombres de los objetos

Después de demostrar que disfrutan de los videojuegos, un estudio profundiza en cómo reaccionan ante cierta información.


Hace casi dos años conocimos que el primer videojuego para perros ya es una realidad. En resumidas cuentas, la compañía JoiPaw pensó en los más peludos de la casa y, como consecuencia de ello, dio vida a un producto dedicado para ellos que les permite emular las aventuras que vivimos en nuestros videojuegos favoritos. Sin embargo, dejando a un lado los videojuegos, ¿sabías que los perros son capaces de reconocer los nombres de los objetos?

Según reconoce Ars Technica en una reciente publicación, los perros pueden formar una conexión entre una palabra y su representación mental, un aspecto conocido como "entendimiento referencial". Anteriormente, se pensaba que los perros eran incapaces de hacer estas asociaciones referenciales, pero dichos estudios tienen una diferencia con el actual: se utilizaban objetos al azar debido a las distracciones o la falta de entrenamiento específico para una tarea. Y, para dejar atrás dichos problemas, los investigadores observaron la actividad cerebral de los perros al escuchar determinadas palabras.

El estudio se basó en el razonamiento semántico humano

Para llevar a cabo dicha prueba, el estudio se basó en el efecto N400, una respuesta cerebral humana que indica razonamiento semántico cuando se presentan nombres de objetos y sus imágenes. Para los perros, el orden de los estímulos se invirtió: primero la palabra y luego el objeto (así captaban mejor su atención). Y, además, se acostaban en la alfombra mientras escuchaban frases grabadas por sus dueños. ¿El resultado? Tremendamente satisfactorio.

Tras escuchar la frase, se mostraba el objeto correspondiente (o no correspondiente) tras una breve espera. En esencia, los resultados mostraron que los perros podían diferenciar palabras y, a su vez, objetos que coincidían o no, sugiriendo así un entendimiento referencial. Además, el experimento se diseñó para ser cómodo con los perros, Por ello, se terminó el test una vez perdía interés o mostraba signos de incomodidad, ya que lo más importante ya estaba hecho: se consiguió demostrar que son capaces de reconocer nombres de objetos.

(Fuente: 3djuegos.com)