viernes, 23 de agosto de 2024

Este es Wolf Ranch, el primer pueblo construido enteramente con una impresora 3D gigante

Lo han construido en Estados Unidos con la enorme impresora modelo "Vulcan" de la empresa ICON.


En este pueblo, todas las casas han sido impresas en máquinas 3D (Foto: Midjourney / Sarah Romero).

Es la comunidad impresa en 3D más grande del mundo. Ha sido bautizada como Wolf Ranch y se encuentra en Georgetown, Texas (Estados Unidos). Se trata de toda una proeza tecnológica ya que las 100 casas que forman esta interesante e innovadora comunidad de propietarios han sido creadas enteramente y capa a capa con una impresora 3D de tamaño industrial.

La construcción de este pueblo, que está a punto de finalizarse, arrancó allá por 2022 en un proyecto que apenas dos años después, será finalizado en unos meses. Esta celeridad ha sido posible gracias a que el modus operandi para edificar las 100 casas no ha sido tradicional: todas ellas han sido impresas en 3D en una colaboración de la empresa texana ICON -especializada en impresión 3D a gran escala-, la compañía Lennar, que también es uno de los mayores constructores de viviendas de este país y el estudio de arquitectura de alto perfil Bjarke Ingels Group (o BIG) de Dinamarca -y que también cuentan con sede en Nueva York-, como codiseñadores. Todos ellos han iniciado toda una revolución arquitectónica.

¿Cómo son las casas?

Se han construido desde cero utilizando el modelo de impresora Vulcan que mide 14,2 x 4,75 metros y es capaz de construir una casa de 278 m2 con una mínima supervisión humana y sin necesidad de moverla. Cada casa se va creando capa a capa mediante la extrusión de una mezcla patentada similar al cemento que va saliendo a través de una boquilla como si de pasta de dientes color gris se tratara, y que sigue un plano previamente introducido, permitiendo cómodamente la construcción de la estructura básica de la casa.

Cuando esta parte fundamental de la casa ha sido completada, es cuando hacen su aparición los humanos, que se dedican terminar las ventanas, las puertas, el techo y todo lo que sea necesario para poder llamarlo finalmente "residencia". Las casas de una sola planta tienen entre 140 y 195 metros cuadrados y dos o tres baños disponibles, según el plano de planta. Los interiores son luminosos y espaciosos con cocina abierta, generosos ventanales y un gran salón.

"Por primera vez en la historia del mundo, lo que estamos presenciando aquí es una flota de robots que construyen una comunidad entera de casas. Y no cualquier casa, sino casas que son mejores en todos los sentidos... mejor diseño, mayor resistencia, mayor rendimiento energético y comodidad, y mayor resiliencia", explicó Jason Ballard, cofundador y director ejecutivo de ICON en un comunicado de prensa.


Panorámica aerea de Wolf Ranch (Foto: ICON).

¿Cuánto cuesta una casa en 3D?

Según los constructores, los precios de las casas, que son de una sola planta y de tres a cuatro habitaciones, arrancan en 400.000 dólares, pudiendo llegar hasta los 600.000 dólares. Cada casa tarda unas 3 semanas en imprimirse por completo y todas ellas están diseñadas para resistir el moho, el calor, las termitas, el agua y las condiciones climáticas extremas. Además, cada vivienda en Wolf Ranch está equipada con un sistema de paneles solares y tecnología de hogar inteligente. Esto incluye una cerradura digital, un videoportero Ring y un termostato inteligente.


El interior de una vivienda de Wolf Ranch (Foto: ICON).

Revolucionando la construcción

Desde su fundación, Icon ha producido sus propias impresoras 3D gigantes, que pueden construir paredes de viviendas capa por capa y han permitido a la empresa producir diseños que superan los límites con elementos como paredes curvas.



Vivienda ya impresa en su fase de armado por mano de obra humana (Foto: ICON).

Pero esto no acaba aquí: la empresa ha creado una nueva impresora, bautizada como Phoenix, que supera algunas de las barreras que tiene la Vulcan, como ciertas limitaciones a la hora de imprimir según qué partes de la casa, a la par que ayudará a reducir los costos de construcción y aumentando las posibilidades de diseño de los hogares finales.

(Fuente: Muy Interesante)